En la época que vivimos hay algo que se está perdiendo y eso es la comunicación en familia. Me he dado cuenta que a los jóvenes y adultos de estos tiempos les importan cosas menos relevantes que tener una buena relación y comunicación con su familia.

Observamos un elemento tan fundamental para la sociedad, abandonado, olvidado e incluso denigrado. Estamos hablando del entorno familiar. No hemos de olvidar que hace no muchos años lo más importante para él ser humano era la familia.

Muchos decimos o podemos decir que somos hogareños y somos de familia. Esto atañe a los mexicanos principalmente, ya que cada cultura se relaciona diferente pero nosotros tenemos o en algún momento tuvimos esa cercanía.

Por ejemplo, cada semana o cada 15 días no faltaba la carne asada en familia o alguna comida con el fin de reunirse y convivir. Pero estamos de acuerdo que no todos siguen fomentando estas costumbres. En algunas familias se ha perdido a causa de las nuevas generaciones.

No estoy generalizando el problema, sino que muchas veces he observado a los jóvenes y adultos expresarse mal de sus padres o hijos y faltarles el respeto de una manera muy fuerte.

Hace poco, me subí al carro de una amiga y estábamos acompañadas por su mamá. Ella había quedado en dejar a su mama en un lugar porque su madre iba a salir.

Pasamos por una taquería y su mamá le dijo: ''¡ay! Se me antojan unos tacos con mucho aguacate y adobada. ¿No te paras por unos?"

Alejandra le contestó de una manera muy grosera y muy seca le dijo: "mira mamá, agradece que te llevo y te recojo de tus salidas” y tú todavía fregando con que quieres tacos. El día que yo me vaya de la casa se te acaba tu criada, porque la casa la mantengo yo."

Yo solo le dije "pobre de tu mamá. ¿Así la tratas siempre?"

Alejandra contestó: "es un asunto que no te debe de importar y si no quieres tener problemas o peleas conmigo, no te metas ni me vengas a dar consejos que no voy a escuchar. Pierdes tu tiempo."

Sucedió hace unos días. Con situaciones tan simples hacemos sentir mal a la otra persona y me he dado cuenta que no importa, nos concentramos en cosas superfluas.

¿Familias tóxicas o Narcisismo Personal?

En un mundo donde creemos que es más importante el ámbito laboral, las relaciones sociales, el status, las cosas materiales y un sinfín de cosas; que nos alejan del ámbito conyugal y familiar.

Queremos culpar o responsabilizar a la familia de una relación tóxica que probablemente se formó a causa de los malos tratos que poco a poco se fueron acumulando. Y, a partir de esto se genera una relación quebrantada por los gritos y el odio acumulado a través del tiempo.

Recordemos que el narcisismo imposibilita a las personas a mirar más allá que en sí mismas, sus deseos y necesidades. Me refiero a que solo tienen una concepción de ellas mismas y no ven a los demás.

Este es el caso de familias, en las que predominan las actitudes defensivas ya que se han ido perdiendo las actividades familiares que propician una sana comunicación.

“Cualquier problema, grande o pequeño, dentro de una familia, siempre parece comenzar con una mala comunicación. Alguien no está escuchando.” Emma Thompson.

*Comunicóloga e investigadora en formación.

editorial@sandiegored.com