El Vaticano anunció durante la mañana del martes 24 de octubre la renuncia de un obispo responsable de la diócesis en el sur de Polonia, a la cual pertenecía un sacerdote, quien habría organizado una orgía gay.

"El santo padre ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la diócesis de Sosnowiec (Polonia) presentada por su excelencia el obispo Grzegorz Kaszak", indicó un comunicado del Vaticano sin dar una razón para la decisión.

Los hechos sucedieron el pasado mes de septiembre, cuando un sacerdote organizó una orgía en su departamento e invitó a un trabajador sexual.

El caso salió a la luz porque uno de los participantes perdió el conocimiento y fue necesario llamar a asistencia médica. La prensa polaca informó que uno de los hombres se desmayó debido a una sobredosis de píldoras para la disfunción eréctil.

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Acto seguido fue lanzado un comunicado en el sitio web oficial:

El padre Tomasz Z y otros dos laicos han cometido una violación muy grave de las normas morales, que la Iglesia no tolera y condena enérgicamente. El incidente se ha convertido en motivo de gran escándalo para los fieles y de justificada indignación pública.

No es el primer incidente que ocurre por parte de algunos de los miembros del clero que conforman la diócesis, por lo que Kaszak ofreció su renuncia el 29 de septiembre y agradeció a los curas y las monjas de su diócesis, además pidió a “todos que perdonen sus limitaciones humanas”.

Los medios de Polonia mencionaron otros dos escándalos en la misma parroquia; en el primer caso, el director de un seminario fue supuestamente sorprendido cuando estaba teniendo relaciones sexuales en un club gay. En el otro incidente, un sacerdote de 46 años fue presuntamente responsable de un homicidio y se suicidó arrojándose a las vías de un tren.

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