Julieta Venegas Percevault nació el 24 de Noviembre de 1970, en Long Beach, California, pero fue criada en Tijuana, Baja California. Ella es hija de los fotógrafos Julia Edith Percevault y José Luis Venegas. Desde la edad de los 8 años empiezan sus primeros acercamientos a la música cuando aprende a tocar el piano clásico y violonchelo. Siendo estudiante de la Preparatoria Federal Lázaro Cárdenas, a los 17 años, un compañero de la escuela invita a Julieta a la banda de reggae/ska “Chantaje”, que sería el núcleo del grupo Tijuana No!, en el que, junto con Álex Zúñiga, compone la canción “Pobre de Tí”, tema que otorgó fama al conjunto. Sin embargo, Julieta dejaría Tijuana No! tras apenas 8 meses en la agrupación.

Deja Tijuana para seguir su sueño

Antes de irse al D.F (ahora conocido como CDMX) Estuvo un tiempo en Monterrey, Nuevo León, con el fin de poder establecer una carrera en el mundo de la música. Durante su tiempo en esa ciudad, estuvo musicalizando obras de teatro, y ya a los 22 años es cuando se muda al Distrito Federal, donde conoció a Café Tacvba, Jaguares y Francisco Franco, con quien posteriormente, Franco invita a colaborar con Venegas en la musicalización de la obra de teatro “ Calígula Probablemente”, una obra de teatro que duró 1 año en cartelera.

En 1996, Julieta fue descubierta por la compañía discográfica BMG, y en ese mismo año firmó un contrato de 8 años e inició la grabación de su primer álbum en solitario.

El estilo musical que ha desarrollado a lo largo de los años

Sus primeros dos discos, Aquí y Bueninvento, fueron producidos por el compositor argentino Gustavo Santaolalla (quien ha trabajado en películas del director Alejandro González Iñárritu). En estos dos discos tiene acercamientos más experimentales, rudos y rockeros, en donde tuvo varios músicos con mucha experiencia; estuvo Joe Gore en la guitarra, quien ha tocado para músicos como Tom Waits, PJ Harvey y Lisa Germano, Joey Waronker en la batería, el cual ha sido baterista y productor de bandas como R.E.M, The Smashing Pumpkins y el cantante multiinstrumentista Beck, Fernando Saunders en el bajo, (Su mayor colaboración fue con Lou Reed, miembro fundador de la banda The Velveteen Underground), y Steve Berlin en el saxofón y la flauta, siendo conocido como uno de los miembros de la banda de rock chicano Los Lobos.

A partir de 2003, en Sí, opta por un sonido pop más electrónico y no hay experimentación de por medio. A partir de este disco se muestra en sus letras e interpretación a una Julieta Venegas cantando canciones felices, cantándole al amor, donde la sencillez hace que conecte con mayor público, siendo así que en este álbum es donde salen clásicos de ella como lo son Andar Conmigo y Lento. Pero, es con Limón y Sal, álbum lanzado en 2006 cuando los éxitos se duplican. Este álbum consta de trece canciones y un bonus track que exploran diversos géneros musicales, desde el pop hasta el rock, pasando por el reggae, el tango y el bolero. Las letras de la mayoría de las canciones abordan temas cotidianos y las complejidades de las relaciones sentimentales, reflejando la visión personal y emocional de la artista. Julieta Venegas es la autora de todas las canciones, excepto en tres de ellas, en las que contó con la colaboración del músico argentino Coti Sorokin y el productor Cachorro López. De aquí salen sencillos Limon y Sal, Me Voy, así como Eres Para Mi.

En estos primeros proyectos para Julieta Venegas, ya están desarrolladas dos de sus mayores cualidades: una conexión genuina con su público en sus interpretaciones, y la versatilidad de los géneros en los que compone. En su trayectoria musical, no ha descartado saltar de un género a otro para desarrollar sus ideas, desde su último proyecto donde canta canciones rancheras, hasta haber llegado a sacar un sencillo junto al productor Tainy y el reggaetonero Bad Bunny.

Julieta Venegas en la actualidad

La ganadora de 8 Latin Grammy y 1 Grammy Award, sacó su último álbum en 2022, titulado Tu Historia. En este álbum tiene una perspectiva donde tanto los géneros musicales que emplea en este proyecto, como su filosofía del proyecto, se sienten diferentes a como empezó. Se muestra un proyecto que no bebe de sus éxitos pasados, donde la música está acentuando su experiencia en la industria musical, en donde comentó que está en una etapa donde el éxito y el recibir premios no es algo que le importe.

Al ser multiinstrumentista, se ha prestado a explorar géneros y tendencias musicales, a lo que en su último álbum explora la música ranchera y ha llegado a contar su postura sobre los corridos tumbados; subgénero musical mexicano que es tendencia en el país. En su postura, en una entrevista para NEO2, expresó su fascinación con este renacer de interés en la música regional mexicana, especialmente en los corridos tumbados y la nueva ola de artistas.

“Para mí es cautivador observar cómo la música avanza y se fusiona con diversas influencias. Me gusta la idea de que la música ahora se crea de manera más natural, influenciada por lo que conocemos y escuchamos alrededor del mundo gracias a Internet”.

Para Venegas, el éxito de este subgénero data en que los corridos tumbados no se enfocan tanto en el ritmo como en la letra, en comparación con géneros como el reguetón o el hip-hop. “Esta música llega desde una perspectiva diferente, más centrada en la narración y la melodía, brindando una experiencia sonora única”.

Aunque la música regional mexicana siempre ha sido valorada, este cambio en las historias y la nueva generación trae consigo una renovación y una visión fresca. Por lo que la cantante considera que esto es favorable para la variedad musical internacional, ya que introduce una nueva dimensión cultural y artística en el panorama global. Este giro también refleja un importante cambio generacional, lo cual siempre es positivo y enriquecedor.

Julieta Venegas ha creado un legado imborrable en la música latina contemporánea, caracterizado por su versatilidad, y profunda conexión emocional con su audiencia. A lo largo de su carrera, ha logrado fusionar géneros como el pop, el rock, la música tradicional mexicana y el folk, creando un estilo único y reconocible que ha trascendido fronteras. Su habilidad para componer letras sinceras y profundas ha hecho que sus canciones sean interpretadas por generaciones de fans en toda Latinoamérica y más allá. Su influencia sigue viva, y su música continúa siendo un testimonio de su talento, autenticidad y dedicación.