En internet se ha vuelto muy famosa la historia de Maggie, una perra de raza mixta que vivía en Líbano donde era maltratada por sus dueños quienes la usaban como práctica de tiro.
Tras sobrevivir a 17 disparos y perder a toda su camada de cachorros mientras estaba embarazada para luego ser encadenada y abandonada a su suerte, fue rescatada por la organización animal Wild At Heart y llevada al Reino Unido
Durante su tortura Maggie lamentablemente perdió ambos ojos, una oreja y se fracturó permanentemente la mandíbula, no obstante, ahora ha encontrado un nuevo propósito para vivir pues se convirtió en un perro de terapia.
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El proceso de este radical y positivo cambio no fue fácil, pues para ello debió superar el trauma y el sufrimiento. Al llegar al refugio estaba completamente atemorizada, pero gracias a la paciencia de sus cuidadores y médicos, mes con mes fue ganando confianza, recuperándose hasta ser oficialmente adoptada.
Maggie es una muestra de resiliencia, demostrando que la pérdida de la vista no es una desventaja para ella pues quería ser parte de todo lo que la rodeaba. Su carácter apacible y temperamento la llevó a ser objeto de respeto en la comunidad y a recibir numerosas muestras de cariño.
Ahora en su nueva etapa como perra de terapia registrada, Maggie, su hermana Mishka y su dueña Kasey Carlin ayudan a otros cachorros y personas en hospitales, residencias y universidades con visitas motivacionales para atravesar el proceso de recuperación, manteniendo la esperanza de que toda mejora con amor.
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