Más de mil 700 millones de yenes destinó el gobierno japonés para el funeral de estado del ex primer ministro Shinzo Abe, asesinado durante un atentado en julio.

Abe fue asesinado en un mitin electoral en julio, por lo que las autoridades prevén la asistencia de decenas de gobernantes y ex-gobernantes al servicio fúnebre que se llevará a cabo el 27 de septiembre en Tokio.

Por otro lado, las encuestas recientes indican que cerca de la mitad de los votantes japoneses se oponen al evento con financiamiento público.

El portavoz gubernamental, Hirozaku Matsuno, detalló que la seguridad deberá costar unos 800 millones de yenes, sumados a 600 millones para alojamiento y 250 millones para la ceremonia, pues delegados de más de 190 países y regiones asistirán a brindar el pésame.

El funeral se realizará en el Nippon Budokan de Tokio, recinto utilizado para conciertos y eventos deportivos y que también albergó el último funeral de estado japonés, en 1967.

El primer ministro Fumio Kishida dijo que los logros locales e internacionales de Abe, el primer ministro más longevo del país, hacen apropiado un funeral de estado, sin embargo, recordemos que a días de su muerte se llevó a cabo un funeral privado en Tokio, donde miles de personas llevaron flores y ofrecieron sus respetos al funcionario.

Cabe recalcar que Tetsuya Yamagami, acusado de matar a Abe y actualmente en custodia, habría atacado al ex gobernante por creer que tenía vínculos con la Iglesia de la Unificación.

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