El nuevo reglamento de seguridad de Rosarito contempla desaparecer a la Policía Comercial de dicho municipio. Entre sus labores, aún vigentes, están vigilar los establecimientos, así como los eventos masivos y las fiestas particulares.

Miguel Ángel Moreno, regidor y presidente de la Comisión de Seguridad Pública en el Calido de Rosarto, comentó que los elementos de la Policía Comercial formarán ahora parte del personal de confianza del ayuntamiento.

La nueva orden está prácticamente concluida bajo aprobación y los integrantes pronto cambiarán de uniforme mientras se esperan sus nuevas condiciones de trabajo.

La reforma fue propuesta por la Secretaría de Seguridad Ciudadana y ahora el pago ya no correrá por dicha dependencia, sino por parte del gobierno municipal.

Aunque muchos policías comerciales tienen la incertidumbre de si perderán sus derechos de antigüedad u otros beneficios adquiridos previos a esta reforma, el tema sigue en análisis y se pretende afectarlos lo menos posible; de esta manera podrían regularizar su situación e integrarse a la policía municipal posteriormente.

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Con información de El Imparcial