El XXIII Ayuntamiento de Tijuana, a través de la Secretaría de Desarrollo Económico (SEDETI) decidió cerrar temporalmente el carril médico, llamado Fast Lane, mientras investiga si se ha hecho uso indebido del servicio.

Desde el martes 1 de octubre se encuentra cerrado. La investigación que han iniciado es exhaustiva. Revisan los expedientes y los usuarios. El objetivo es hacer ajustes en el sistema de cruce para volverlo más ágil.

De acuerdo con Arturo Pérez Behr, secretario de Sedeti, los mismos usuarios son los que se han quejado sobre la venta de pases médicos, lo cual no está permitido.

“Estamos verificando que no se esté haciendo mal uso de los pases del Fast Lane, que no se estén realizando actos de venta o reventa de los mismos, es parte de la transición que estamos trabajando” dijo Arturo.

Debido a esto, se ven afectado los tiempos de espera en el Fast Lane, por lo que habrá que proceder a depurar a algunas de las mil clínicas, hospitales y doctores que lo conforman.

Aún no hay una fecha para la reapertura del carril, aunque las autoridades están trabajando lo más rápido posible al ser un tema prioritario para el turismo médico.

Con información de El Imparcial

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