La inyección letal ha sido la opción predilecta por muchos años en las prisiones donde se llevan a cabo ejecuciones, pero Oklahoma, Estados Unidos, siempre ha estado un paso adelante al haber sido la primer administración a nivel internacional en llevar a cabo ese método.

Oklahoma tiene el mayor número de ejecuciones llevadas a cabo en Estados Unidos y ante la escasez de sustancias utilizadas para la inyección letal, ha optado por una alternativa más "creativa": Gasear con nitrógeno a los presos condenados a muerte.

Son 12 los presos que se enfrentan a esta opción por negación de venta de sustancias letales por parte de las farmacéuticas en EE.UU., algo que ha llevado a algunos estados a utilizar métodos terribles de muerte para sustituir la escasez, tales como matar a 8 presos con inyección letal en 10 días o...

Utilizar una inyección con sustancias sospechosas. Uno de los peores casos fue el de Clayton Lockette en el 2014 (condenado por secuestro, violación, y asesinato), a quien se le inyectó un fármaco poco estudiado llamado midazolam, lo que lo llevó a agonizar 43 minutos antes de morir. Algo que Obama calificó de inhumano.

Se espera que el método para gasear nitrógeno se dé a través de una máscara, la inhalación extrema de este gas provocará mareos, dolor de cabeza, pérdida de respiración y más, hasta que se produce la muerte por hipoxia, falta de oxígeno.

Mike Hunter, fiscal general de oklahoma menciona:

El nitrógeno es efectivo, sencillo de administrar, fácil de obtener y no requiere procedimientos médicos complejos.

“Nunca ha sido usado antes. Se estaría utilizando a los presos como conejillos de indias, podrían morir con enorme sufrimiento,”protestan algunas organizaciones humanitarias.

Vía El País