Para las nuevas generaciones las transferencias electrónicas se han vuelto cada vez más comunes a la hora de realizar o recibir pagos o realizar préstamos.

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El hecho no es extraño ya que resulta sumamente sencillo de realizar y el tiempo que se emplea también es mínimo. Sin embargo es necesario tomar ciertas precauciones para evitar problemas con el Servicio de Administración Tributaria o también conocido por sus siglas como SAT.

Una de las principales cosas que debemos cuidar a la hora de realizar una transferencia electrónica, es el concepto de pago, que muchas veces no tomamos en consideración y tendemos a escribir bromas, las cuales pueden causarnos problemas.

La opción de “concepto de pago” que es necesario llenar para poder llevar a cabo la transferencia, debe ser considerada con seriedad porque tal movimiento le indica al SAT en qué se está moviendo tu dinero o porqué motivos se ingresa dinero a tu cuenta; si el motivo de pago resulta sospechoso para el SAT, puede causar confusión a la hora de solicitar aclaraciones.

Hay palabras que pueden usarse sin generar sospechas como pago, abono, ahorro, deuda, pago quincenal o tarjeta, etc.

Otro punto importante a considerar es el monto de la transferencia. Recuerda que el SAT puede solicitar aclaraciones si la cantidad rebasa los 10 mil pesos, los cuales, aunque sean donativos, deben declararse.

Entonces, la próxima vez que vayas a realizar una transferencia electrónica considera seriamente escribir el verdadero “motivo de pago” para evitar problemas con el SAT.

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