En un momento donde la democracia ha dejado de significar, donde los gobernantes no dudan en abusar de su poder y distanciarse de la gente, México necesita que la ciudadanía se incluya en el proceso de toma de decisiones, necesita unidad, organización y sensibilidad. Baja California demanda que se construyan normas básicas para el restablecimiento de un Estado democrático, incluyente y progresista.
Jaime Martínez Veloz, candidato a la diputación federal del Quinto Distrito de Tijuana en la coalición “Va por Baja California”, integrada por los partidos PRI, PAN y PRD, conoce profundamente la necesidad de la población, pues ha formado parte de Tijuana desde hace veinte años, ha tenido la oportunidad de recorrer las calles, entablar amistades genuinas y alianzas con la gente. Hoy la sociedad requiere un nuevo acuerdo social, en el que todas las voces sean escuchadas. El proceso de acercamiento debe legitimar a la labor política, pues no es posible una política sin contacto, sin reunión y comunidad.
Veloz propone un Estado que procesa las diferencias, que dialoga y se mueve en tres direcciones fundamentales: la justicia, la solidaridad y la equidad. Además de regresar la legalidad y el Estado de Derecho —ambos destruidos por el gobierno de MORENA en Baja California—. Y en relación a los eventos recientes de una tentativa de expropiación del Club Campestre por parte del Gobierno del Estado, Veloz escribe en su propuesta “Por una nueva institucionalidad democrática, armónica e incluyente” que buscará impedir cualquier acción de carácter expropiatorio por parte de los gobiernos local o nacional que afecte cualquier modelo de propiedad privada o social contemplada en el marco legislativo nacional vigente.
El candidato sostiene que prácticas demagogas como el caudillismo, el autoritarismo, la apatía, el compadrazgo y la hegemonía partidista serán arrancadas de la vida pública, permitiendo que se geste el Poder Ciudadano y todos tengan la posibilidad de actuar dentro de los quehaceres de nuestro país, atendiendo los intereses de la población y no de los tiranos. Queremos una Baja California donde haya nuevos caminos de esperanza, que permitan que la transición suceda y que estemos a la altura de nuestros sueños.
Debemos fortalecer nuestra herencia histórica e identidad nacional para permitir que se establezcan las bases de un Estado justo, consciente de su tiempo y de su gente; donde la vida económica, política, social y cultural se transformen en beneficio de las y los bajacalifornianos.
En la siguiente liga pueden leer la propuesta completa.
VIDEO RELACIONADO: Tijuana no se expropia, no se vende, no se rinde ni se pone de rodillas: Veloz
Comentarios
Facebook
SanDiegoRed
Nuevos
Mejores