SAMARA, RUSIA.- La selección de Inglaterra superó la barrera de los cuartos de final y jugará por tercera vez en su historia las semifinales tras derrotar a Suecia por marcador de 0-2 en la Arena de Samara.

Desde el comienzo la diferencia de estilos fue muy notoria, por un lado, el equipo de la rosa buscó hacer daño con base a su velocidad y dinámica, mientras que Suecia mantuvo su férreo orden táctico y esperar al contragolpe, fórmula que les había funcionado durante todo el campeonato, pero los británicos acababan de descubrirles su debilidad.

Suecia estaba manejando el duelo a su gusto, jugando a ritmo lento, pero Inglaterra aunque tardó en reaccionar con un disparo de Harry Keane al 18, de a poco comenzó a castigar a los nórdicos con letales latigazos incluyendo dos mano a mano de Raheem Sterling que no supo concretar.

Al minuto 30’ Harry Maguire aprovechó un tiro de esquina para saltar y rematar de cabeza para romper el duro cascarón sueco y hacer el 1-0.

En el segundo tiempo, Suecia se volcó al ataque, acosando al equipo de los tres leones con cañonazos a la puerta que salvó el portero Jordan Pickford con providenciales atajadas.

Justo cuando los suecos acariciaban el empate, Delle Alli se sacudió presión y con un sólido testarazo marcó el segundo gol inglés que selló la victoria.

Suecia siguió insistiendo con anotar un gol, viéndose obligados a romper su orden perfecto, pero Pickford se mostró como una auténtica muralla que no pasar ningún balón.

Inglaterra ahora coquetea con la historia al avanzar a semifinales, siendo su tercera semifinal de su historia y la primera desde 1990.

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