El mediocampista mexicano Luis Chávez y el Dinamo de Moscú están a un paso de poder levantar el trofeo de la Liga Premier de Rusia, tras vencer 4-1 a Krylia Sovetov de Samara en la penúltima jornada de esta competencia.

Con este resultado el equipo capitalino podría ser campeón incluso este mismo fin de semana, ya que la escuadra se encuentra en el primer lugar de la tabla con 56 puntos, 5 unidades más que su más cercano perseguidor el Zenit de San Petersburgo que tiene todavía dos juegos por disputar. Pero si el conjunto del norte de Rusia pierde este domingo ante Akhmat Grozny, el Dinamo sería campeón.

Pero si Zenit gana, Chávez y Moscú tendrían que vencer el próximo sábado al tercer lugar de la competencia, el Krasnodar de visita, para así levantar el título, algo que no lograba Dinamo desde 1976.

Tras la victoria de este día en el Estadio Central de Moscú, Chávez, quién fue titular y jugó los 90 minutos, comentó que no importa lo que hagan los demás, ya que en su mente solo hay un objetivo.

Ganar y ser campeones", contestó el ex jugador de Pachuca y Xolos. "Yo creo que es lo mejor que nos puede pasar y es por lo que estamos aspirando.

Agregó que él da su máximo esfuerzo, esté donde esté, y es ese el secreto de su éxito en la Liga Premier de Rusia.

Yo creo que independientemente del lugar a donde vaya cada jugador, tiene que trabajar en lo personal siempre, no echarse a la hamaca, como decimos, para relajarse", agregó."Y en mi caso yo vine a trabajar, a ganarme un lugar y hacer cosas importantes.

Chávez aprovechó para hablar de su convocatoria con la Selección Mexicana y lo que le espera en el verano en la Copa América 2024.

Yo creo que más allá de eso, también es el trabajo que cada que voy a selección hago, trato de ser constante", comentó. "Siempre más allá que a veces no se dan las cosas, trato de siempre poner la actitud y ser constante en mi trabajo". "Y yo creo que eso es lo que me ha llevado a estar en las constantes convocatorias", concluyó.

Chávez, el Dinamo Moscú y sus aficionados estarán al tanto de lo que haga este sábado Krasnodar y Zenit, para saber si pueden festejar por primera vez en casi 40 años, o tendrán que jugarse todo en la cancha 90 minutos más.