A solo una semana y media de Navidad, las tiendas de San Diego, California, se han visto rebasadas por los clientes que realizan las compras de temporada buscando ese regalo especial para sus seres queridos y familiares, generando un caos a la hora de pagar, con largas filas y una espera de hasta 1 hora, incluso entre semana.

No solo eso, los clientes que viven en México deben invertir en ocasiones de 3 a 4 horas en las garitas para cruzar a los Estados Unidos usando su visa normal o Ready Lane. Lo cual convierte la experiencia en toda una odisea.

Tiendas departamentales populares como Ross, TJ Max, Burlington y Marshalls, mismas que cuentan con ropa y artículos del hogar con descuento, pasan por una situación caótica. Artículos revueltos, saturación de pasillos, tallas escogidas y escasas e incluso falta de personal contribuyen a una operación lenta.

Miguel H, supervisor de Burlington, ubicada en Dennery Rd cerca de Palm Ave. Indicó que generalmente los clientes gastan entre 300 a 800 dólares en estas fechas. Además, los empleados atienden diariamente entre 4 mil a 5 mil personas.

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Acudiendo un martes a mediodía, hicimos algunas compras en esta sucursal e hicimos una fila de 45 minutos; esto aplica también para personas que van a regresar o cambiar algún artículo, reclamando la devolución.

Una de las cosas que se puede hacer para ayudar a agilizar la atención es remover los ganchos de la ropa que se va comprar, separar los artículos grandes de los pequeños, verificar que los productos tengan el código de barras, pagar con tarjeta y ayudar a los empleados a doblar las prendas.

Se recomienda, a su vez, acudir a las tiendas acompañado, ya que, de esta manera, mientras una persona hace fila para pagar, la otra puede seguir haciendo las compras, ahorrando tiempo y esfuerzo.

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