Un nuevo informe técnico presentado este lunes por la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha indicado que la nueva variante del Covid-19 denominada Ómicron posee un nivel de transmisión a nivel global que es alto.

A pesar de lo anterior, el organismo hace énfasis en que que no hay indicios de que cause casos más graves de Covid-19.

La nueva cepa ha provocado ajustes en las restricciones de viajes internacionales, como el caso de Japón que ya no permite que turistas extranjeros lleguen al país; por su parte, Canadá ha alertado que ya hay algunos casos de Ómicron en Norteamérica.

Dentro de este contexto, Sudáfrica ha minorizado el impacto negativo de esta variante. La doctora Angelique Coetzee, presidenta de la Asociación Médica de Sudáfrica dijo que hasta ahora los pacientes contagiados con Ómicron presentan síntomas muy leves de la enfermedad.

Lo que estamos viendo ahora en Sudáfrica, y recuerden que estoy en el epicentro, es extremadamente leve. No hemos hospitalizado a nadie aún. He hablado con otros colegas y el panorama es el mismo.

Calificando de exageradas las restricciones de vuelos procedentes de Sudáfrica, el presidente Cyril Ramaphosa sostuvo que la OMS y otros países discriminan injustamente a Sudáfrica y no ayudan a resolver el problema. De paso exhortó a una distribución más equitativa de la vacuna.

La OMS descartó que hasta el momento haya habido una muerte relacionada con esta nueva variante, pero augura que la posibilidad de que sea más transmisible es elevada.

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Con información de Actualidad RT
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