Si bien se puede contar con un excelente guión, dirección de fotografía, iluminación, trama y continuidad para cualquier proyecto audiovisual que sea presentado en cines o por medio de servicios de streaming, la pieza clave para el éxito de estos es el interés que el público ponga, gracias a ellos el futuro de estos productos termina como un éxito total o en el fracaso.

Pero cuando una serie (o película) sobre pasa los límites de la conversación de boca en boca y consigue volverse tendencia en las redes sociales, podríamos decir que ya está en las ligas mayores, pues al llenar Facebook o Twitter con memes o imágenes referentes al programa, no sólo demuestra el impacto que éste está teniendo, también genera interés en terceras personas que quieren formar parte de la conversación o entender de qué se trata aquella imagen que ha invadido su feed en los últimos días.

Eso es justo lo que ha estado pasando con El juego del calamar de Hwang Dong-hyuk, un drama de supervivencia que, si bien no es una trama estrictamente nueva, la manera en la que se desarrolla todo visual y narrativamente, resulta llamativo. Pero luego de una semana de estreno, han surgido acusaciones en contra del director por el supuesto plagio de una película japonesa de terror estrenada en 2014: As The Gods Will, de Takashi Miike (Fudoh: The New Generation , 13 Assassins).

El juego del calamar tiene como premisa a un grupo de personas que batallan con la escasez económica, cuando se les invita a una competencia que involucra una serie de juegos infantiles son atraídos por jugosas recompensas, sin embargo, estos involucran también un riesgo mortal. Las acusaciones surgen a partir de un par de escenas que son bastante similares tanto en la narrativa como en lo visual; sobre todo se han referido a la escena de la muñeca gigante y el reloj en cuenta regresiva.

A través de The Straits Times (vía AsiaOne), el también director de Silenced, una historia que delata los abusos a los que son sometidos los jóvenes sordos en Corea del Sur, hizo frente a las acusaciones sobre el supuesto plagio. Hwang Dong-hyuk aseguró que el guión de El Juego del Calamar lo desarrolló entre 2008 y 2009, pero debido a la falta de interés por parte de los estudios, el proyecto quedó archivado por años, hasta que Netflix decidió hacer su mejor apuesta.

Es cierto que [los primeros momentos son] similares, pero después de eso, no hay similitudes. Pero si tuviera que decirlo, diría que lo hice primero.

El cineasta dejó claro que él era consciente de lo parecidas que podrían ser las primeras escenas, pero aseguró que no era más que una coincidencia puesto que su proyecto él ya lo tenía escrito antes del lanzamiento de As The Gods Will, por lo que resultaría imposible que haya copiado las mismas. Al ser consciente de que a veces las ideas pueden resultar parecidas, declaró que él no tenía intención de hacer algún reclamo sólo por aquellas escenas.

Algunos críticos señalaron que uno de los grandes aciertos de la serie es que consigue resaltar todo lo que narra a través de juegos visuales, que no sólo involucran los tiros y tomas cinematográficas, sino también el uso de ciertos colores llamativos y figuras que generan cierto eco en la mente del espectador. Si bien las historias de juegos de supervivencia no son algo nuevo, prueba de ello es toda la franquicia de Saw: El Juego Macabro, la particularidad de esta es que plantea juegos infantiles que poco a poco se tornarán oscuros o siniestros.

Nota publicada originalmente en Tomatazos

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