Desde hace algunas semanas, la alcaldía de Tijuana tiene una nueva dirigente: Karla Ruiz Macfarland, quien en octubre 2020 ya había fungido durante 20 días como presidenta municipal y quien también es la primera mujer en tener el título de alcaldesa de este municipio.

Luego de esos 20 días el entonces alcalde, Arturo González Cruz, regresó sólo para volverse a retirar de manera definitiva entrando el 2021, brindándole la oportunidad a Ruiz Macfarland de tomar las riendas y desempeñar un papel que, de momento, no tiene cabida para los reproches.

De hecho, desde que fue nombrada alcaldesa, inició con un plan de 60 días, en el cual propone diversas acciones y actividades relacionadas con la Transparencia, Seguridad, Bienestar y Desarrollo y Movilidad: su primera acción fue librar al Ayuntamiento de la influencia del exalcalde, quien tenía amistades en puestos poco merecidos.

Otra de las propuestas que se ha llevado a la acción, es la de mejorar las relaciones locales e internacionales que un puesto y una ciudad como los que maneja Ruíz Macfarland necesita imprescindiblemente: ha mantenido conversaciones con Todd Gloria, alcalde de San Diego, para asegurar el trabajo a favor de las comunidades en ambos lados de la frontera.

Asimismo, uno de los conflictos más notorios durante la administración del exalcalde, fue el deseo desperado de convertirse en Gobernador de Baja California, cosa que fue el desencadenante de una terrible relación con el Gobierno Estatal y que sólo terminó por afectar a Tijuana. Pero este no es el caso de la nueva alcaldesa, quien llegó a reconciliar y ordenar una administración sumida en el caos.

Además de esto, en cuanto a las relaciones internacionales, fue bajo su guardia y como parte de su plan de 60 días que la comunidad coreana en Tijuana ayudó a la reforestación de 47 hectáreas del Parque Morelos: alrededor de 50 voluntarios contribuyeron con esta jornada.

Entre otras cosas, desde que asumió su cargo, Ruiz Macfarland ha puesto en acción planes que ha propuesto, ha hecho un buen trabajo librando al Ayuntamiento de influyentismo, ha mejorado las relaciones con el gobierno del Estado y las relaciones internacionales, ha puesto en marcha un plan para cuidar del medio ambiente y gracias a sus propuestas se abrió la primera escuela de tiro con arco en Tijuana.

Podríamos seguir hablando sobre el compromiso de la alcaldesa para generar estabilidad y buscar compañía y aliados comprometidos con la ciudad, pero con ver la reactivación social y política que se lleva día tras día en el Ayuntamiento se pone evidencia este compromiso.

Por esto, no sorprende que una encuesta realizada por PluralMX, la mayoría de los tijuanenses, un 42%, respondiera que aprobaba la gestión realizada hasta el momento por Ruiz Macfarland, mientras que un 24% permaneció imparcial a esta pregunta.

Esta aprobación es bastante superior a la que obtuvo su predecesor, Arturo González Cruz, quien dejó su mandato con una escasa aprobación de 23% y fue, de entre todos los presidentes municipales de Baja California, el más desaprobado durante su mandato, según la encuesta de la revista PluralMX.

La buena noticia es que aún quedan siete meses para que termine el mandato de Ruiz Macfarland y si en tan sólo unas cuantas semanas ha hecho un papel mucho mejor que el del exalcalde y cuenta con la aprobación de los tijuanenses, se quede inferir que su gobierno tiene todo el potencial para mejorar.

Conoce a Karla Ruiz Macfarland