A finales de octubre de este año, la Cámara de Comercio de San Ysidro mandó una carta al Embajador de Estados Unidos en México para pedirle que abriera la frontera para las festividades debido a que muchos negocios de San Ysidro podrían quedar en la ruina debido a las restricciones implementadas desde marzo.

La respuesta fue evidente, ya que no abrieron la frontera y anunciaron que hasta el 21 de noviembre darían una nueva actualización. Esta actualización parece que será alargar, nuevamente, este periodo de espera, ya que San Diego anunció que se encuentra en color púrpura.

No obstante, la Cámara de Comercio de San Ysidro dice que esto es irrelevante para los comerciantes de la zona, ya que no ha existido una auténtica reactivación económica debido a que simplemente no puede haberla si no abren la frontera.

Añadieron que el día martes 10 de noviembre, tuvieron una reunión con el Grupo de Trabajo Portuario y la CBP y éstos informaron que estuvieron realizando pruebas diagnósticas de coronavirus en la entrada terrestre en San Diego durante 4 meses.

Los resultados de estas pruebas revelaron que de los resultados positivos sólo el 16% fueron de residentes mexicanos, es decir, el resto de los positivos fue estadounidense. Para la Cámara de Comercio estos hechos sólo confirman que las restricciones son “arbitrarias” y que “lejos de hacer algo en la lucha contra el Covid-19 están dañando nuestras comunidades fronterizas más que el virus mismo”.

Por último, realizaron una petición al Condado de San Diego en la destacaban que se ha hecho una excelente labor brindado protocolos de seguridad sanitaria para comercios y que “sólo estamos pidiendo que se nos permita hacerlo”.

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