Pocos temas tocan las fibras sensibles del ser humano como lo son las mascotas, y en especial los miles de perros callejeros. Conocer su realidad basta con solo una mirada a sus ojos que cuentan tanto sin decir nada.

Víctimas de maltrato, enfermedades, atropellos y falta de amor, son muchos los que cada día pierden la batalla en la dura carrera de la vida. Otros olvidan lo que significa tener un hogar, sentirse parte de algo, pero el anhelo resurge gracias a la ayuda de buenos samaritanos quienes se encargan de salvarlos, curarlos de las heridas del cuerpo y el alma, para luego encontrarles una familia adecuada para ellos.

Teniendo esta temática presente, Verónica Salgado, originaria de Ensenada, decidió escribir un libro que retratara la vida de los canes abandonados, sueño que se hizo realidad en 2017 con “Eliot un perro de la calle”, cuya conmovedora historia se ha ganado los corazones de los lectores.

En entrevista exclusiva nos comentó la premisa de esta fascinante entrega.

Es un perro callejero. Un perrito que caminó mucho tiempo solo. Después va acompañado por sus amigos que va encontrando al paso de los días y descubre que el ser humano es capaz de dar el más grande amor, pero tambien de lastimar.

Su inspiración llegó después de perder a su cachorro, pensando que quizás alguien lo encontró y se preocupó por él, por lo que fue a colaborar con la organización “Cuatro Patas", donde fue testigo de los cientos de perritos que necesitaban apoyo, muchos de ellos desahuciados y desnutridos. Entorno a dichas experiencias, viendo como algunos pasaban de la desconfianza o el dolor, a sentir sus primeras caricias y encontrar un cambio en su vida, le dio forma a su novela. En sus páginas se refleja el sentir del personaje principal, Eliot.

Es un perrito que tiene esperanza, que jamás la pierde, un perrito que ve al ser humano con ojitos de amor y dice "un día voy a encontrar ese ser humano, al correcto".

La labor realizada en la asociación impactó duramente a Verónica, quien manifestó su deseo de hacer algo más, no solo llevándose a casa a algunos perros para cuidarlos, sino creando algo permanente que hiciera reflexionar a la gente, en este caso su libro.

Un día que estaba muy triste por este tema quise hacer algo que tocara los corazones, algo que no caducara, algo que siempre estuviera a la mano, que se pudiera compartir y hacer concientización en esto de la adopción y el rescate de estos perritos que están en la calle.

Trabajando como niñera para un famoso productor de cine en Los Ángeles y viviendo los fines de semana en Ensenada, Verónica nos platicó que fue complicado iniciar este viaje, el cual no estuvo exento de cuestionamientos y giros inesperados.

Fue un camino muy largo, personalmente porque quería que el perrito fuera quien contara la historia. Después quería que conectara con la gente, independientemente de que es un perrito. Tomé en cuenta el amor, la soledad, el deseo de pertenecer a una familia, de ser querido, sentir hambre, frio, calor, pero ellos no pueden hablar. Es un libro que tiene algunas partes fuertes porque así quería yo, que de veras tocara. Tuve mis dudas en el camino, dejé de escribir algunos meses, con una de las partes más difíciles para mí, que fue hablar de cachorro. Seguí escribiendo cuando decidí que no, que no omitiría esa parte, que seguiría.

La autora platicó con un notable entusiasmo el cómo dio a conocer su obra, preguntando en muchos lugares y pidiendo consejos a personas que conocían sobre el tema de la publicación, hasta que finalmente encontró el camino, logrando hoy que “Eliot, un perro de la calle” sea uno de los libros más vendidos en Amazon en la categoría de mascotas.

Visitas a escuelas para hacer lecturas infantiles, presentaciones en ferias de libro, casas de la cultura y otros eventos, ayudaron a darle impulso al trabajo que poco a poco fue tornándose más popular. Verónica dijo que ver a las personas llorando en las salas de lectura al abordar los pasajes del libro fue algo emocionante.

El título fue originalmente pensado para niños pequeños, sin embargo, en el proceso, se dio cuenta que la historia era dura y que no la quería cambiar, por lo que el rango de edad subió de 10 años en adelante.

En la charla nos dijo también que ella es dueña de “Eliot”, el cual sí era un perro de la calle, por lo que la historia está basada en él y la experiencia de muchos animales abandonados. Nos confesó que en un principio su perro le perteneció a una familia que lo adoptó, pero luego se dio cuenta que ellos lo habían abandonado en una propiedad. Es ahí donde contrastan los dos lados del ser humano, uno representa la indiferencia y el otro la bondad.

Al darme vueltas por la casa donde él vivía me di cuenta de que no había nadie. Al tercer día fui con mi hija y vi que cabía por la reja y nos lo “robamos”. El libro lleva su nombre, el nombre de todos los perritos que siguen en la calle.

La segunda edición de esta fábula fue una propuesta que le hizo su traductora al inglés, Gabriela García, quien le vio potencial a la trama para crecer y agregar nuevas situaciones y amigos que ayudarán a Eliot en su búsqueda.

Un personaje muy fuerte, entrañable y querido es una lombriz de tierra que viene en esta edición, la escribí en un hotel de la ciudad de México y fue de corridito por lo que quería transmitir, fue como regresarme al primer día.

Cambiar parte del argumento y dejar que alguien más se involucre en el proceso creativo de su obra fue algo que hizo dudar a Verónica, pero finalmente aceptó. Las ocupaciones, el cansancio y múltiples actividades amenazaban con tornar la expansión del libro en un proceso poco llevadero.

"La historia creció y creció de esta manera, había que ponerlo todo o no se hacía, entonces viajé con la computadora”.

Para alimentar la experiencia, “Eliot” tiene muchos elementos a su alrededor que lo hacen llegar a más personas: Su propia botarga, merchandising, un corto animado y un libro infantil llamado “Toys are for sharing”

De igual forma, un tema musical fue creado para esta historia: “Ya estoy feliz”, interpretado por la cantante ensenadense Mercerdes Baquedano, producido por Giovanni Arreola y con la colaboración del saxofonista Javier G.

La autora le da una recomendación a todas aquellas personas que deseen crear su propia novela:

La única manera es sentarse a escribir, no pensar en lo que alguien más puede pensar de la historia, ya después vendrá lo que sigue…Si te detienes a pensar en qué dirán (imagínate mi perro habla en la historia) pues jamás lo hubiera hecho.

La segunda edición de “Eliot, un perro de la calle” ya está a la venta en inglés y español en Amazon y pronto estará disponible en su versión física en ambos países.