El caso de los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa en 2014 sigue dando de qué hablar.

Recientemente se filtró un video del interrogatorio al presunto responsable del asesinato de los 43 estudiantes, Felipe Rodriguez Salgado, "El Cepillo," integrante del grupo delictivo Guerreros Unidos, quien es cuestionado por el ex director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), Tomás Zerón de Lucio, en un procedimiento poco ortodoxo.

En las imágenes se puede ver al acusado sin camisa y con el rostro cubierto declarando bajo amenazas y sin asistencia legal. Dicho testimonio no fue incorporado al expediente del caso.

Durante la conversación se puede oír decir al funcionario "Ya valió madre. La primera mamada que me digas, cambiamos el tono, ¿va?”, así como "La primera mentira y te mato", sin embargo, poco después se percibe que fueron incluso considerados con “El Cepillo”, dándole una camisa, una botella de agua, preguntando por su rodilla (misma que fue lastimada por los elementos que lo apresaron) y hablándole en un tono tranquilo y “por las buenas” mientras cooperaba.

Diversos medios de comunicación han centrado la noticia entorno a Zerón de Lucio, pues el gobierno de México emitió una ficha roja de Interpol para detener y extraditar al funcionario de la desaparecida PGR, quien actualmente se encuentra en Canadá considerando el asilo político.

La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, ven como relevante el testimonio del ex director de la AIC para realizar más indagatorias y dar con respuestas respecto al tema de Ayotzinapa.

Zerón es acusado de incurrir en alteraciones y ocultamiento de indicios, así como torturar a los detenidos para que confesaran su participación en los hechos.

Irónicamente, “El Cepillo” ahora se encuentra caminando por ahí sin preocupaciones, pues un juez federal de Tamaulipas ordenó su liberación en septiembre de 2018, aun cuando la PGR lo había presentado como autor confeso y fuese acusado de delincuencia organizada y secuestro.

¿Por qué entonces el Estado se preocupa más por ex director de AIC que por el verdadero culpable? Además ¿Querían que el interrogatorio al sospechoso fuera con “por favor” y “gracias”? La cinta no muestra golpes, ni gritos, los cuales seguramente existen en otros interrogatorios no filtrados. En fin, victimizan al asesino y linchan al oficial que lo interrogó ¿No es absurdo?

Con infiormación de La Jornada