Hilo rojo: Dos pequeñas y simples palabras, sin embargo, mantiene un gran concepto.

Cuenta una leyenda en Japón, que las personas destinadas a conocerse están conectadas por un hilo rojo. Este hilo lleva contigo desde tu nacimiento y te acompañará, tensado en mayor o menor medida, más o menos enredado, a lo largo de toda tu vida.

Así es que, el Abuelo de la Luna, cada noche sale a conocer a los recién nacidos y a atarles un hilo rojo a su dedo. El dedo meñique, que está conectado al corazón.

No importa lo que tardes en conocer a esa persona, ni el tiempo que pases sin verla o si vives del otro lado del mundo: el hilo se estirara hasta el infinito pero nunca se romperá. ¿Sera verdad?

Ya no me digas tonterías

—¿Saben? Anoche Salí con un tipo, su nombre es… (Mencionó a un empresario de la ciudad) creí que todo sería genial, pero ¿saben qué? El hombre es realmente un idiota —dice Naomi, una joven de 25 años que está montando su propia línea de ropa.

—¿Te quiso llevar a la cama en la primera cita? —pregunto mientras tomo de mi Cosmopolitan.

—No —toma de su tarro de cerveza. —Estábamos cenando en Baja Terra de Galerías Hipódromo, todo iba a la perfección, hasta que el tipo dijo que yo era la chica de su vida. Me asuste, no les miento. De pronto mencionó una historia de que tengo la otra parte de su hilo o algo así. Yo le dije, lo siento. No soy costurera, después de eso salí del lugar casi corriendo y me fui a costar con mi Fuck-Budy. No sin antes decirle que, no quería que me llamara.

—Creo que halaba del hilo rojo del destino —comenta Jasper.

—¿Qué es eso o qué?

—Es una leyenda —interrumpe Fionna. —Se dice que estamos conectados a alguien por medio de un hilo rojo que está atado mágicamente a nuestro dedo meñique.

—Sí, es de origen japonés y ese hilo siempre te mantendrá con esa persona que, tarde o temprano le conocerás —terminó con una mueca burlona.

—¡Qué horror! Ya, basta. No me digan tonterías, espero y no sea cierto.

El creer este mito o leyenda, de que en algún lugar del mundo, alguien tiene el otro extremo del hilo del cual te une y solo tienes que encontrarlo es tan fascinante, pero... ¿Dónde está esa persona? ¿Realmente hay una persona esperando a complementarnos?

Qué tal si hubo un momento en el que amaste a alguien con la misma fuerza con la cual te sostienes del tubo del camión para no caerte y no funcionó, ¿significa eso que no era tu alma gemela?

¿Qué pasa si no la encuentras? ¿Significa que eres una persona incompleta?

¡Lo encontraré!

Jazmín, menciona que, si su ex novio no fue el indicado, ella muy en el fondo lo sentía.

—Sé que él no fue mi otra mitad, sin embargo yo tengo al amor de mi vida en alguna parte. Quizá aquí o en China… incluso Taiwan. No me importa, yo sé que estaré con el verdadero amor de mi vida en algún momento, no importa si me lleva toda la vida.

Jasper se acerca a mi oído : ¿Y si no llega?
El comentario me es muy aterrador. El solo pensar que solo hay una persona que te conecta... ¡Que frustrante! Prefiero darme un tiro que quedarme solo con eso.

Reencuentro con Mr. Estupendo

Después de verme con Lizzie y Gisele en Macroplaza, estaba a punto de pedir un Uber, cuando algo me hizo que volteara y me encontré con un rostro conocido, diseñador gráfico, 26 años. Me sonríe.

—Hey, ¡Que onda! El domingo fue tu cumpleaños, ¿cierto? —Asiento. Y me da un abrazo acompañado de un felicidades. —¿Tienes algo que hacer? —pregunta viendo el reloj de su muñeca.

—Mmm… no ¿y tu?

—Tampoco, ven —dice mientras da la vuelta.

Lo sigo. Llegamos a Starbucks y me dice que pida lo que sea, sera mi regalo de cumpleaños atrasado y sin hacerme del rogar pido un frapuccino y el un americano. Al entregarnos nuestra orden nos sentamos en la parte de afuera.

—¿Cuantos cumples?

—¿Ya lo olvidaste?

—No... pero quiero que lo digas.

—Dime tu edad primero…

—No.

—Vamos, no me hagas decirla en voz alta.

Reímos.

—Oye ¿que opinas del hilo rojo?

—¿La leyenda japonesa?

Asiento.

—Pues me gusta la historia… el rojo es mi color favorito. fuera de eso, no tengo idea —yo vuelvo a asentir con la cabeza y bebo de mi bebida. —¿Tuviste un buen cumpleaños?

—Fue excelente.

—Me alegro…

Después de una hora de platicar, me comenta que tiene que irse para recoger a su madre en Monarca, nos despedimos a las afueras de la cafetería y mientras se va pienso en algo que menciono: Tu alma gemela está frente a ti, pero no lo descubres aun.

Lo malo de la única alma gemela es que es tan inalcanzable que tiene que fallar y te sientes mal sobre ti. Es mucho más fácil conseguirte a una persona idiota, esas las encuentras en cada esquina.

¿Y qué hay de ti? ¿Ya encontraste tu Otra Mitad? ¿Cuántas Almas Gemelas has tenido? Hasta el momento... ¿qué tan enredado crees que este ese Hilo Rojo que tiene el dedo de tu corazón?